Pesca, protesta social y tecnología en el mar
Por RG
El Atlántico – 27 de mayo de 1999
A fines de la década de 1990, la ciudad de Mar del Plata y el litoral marítimo argentino atravesaban una crisis pesquera y laboral profunda. Mientras la actividad enfrentaba caídas de producción, despidos y conflictos gremiales, surgían nuevos debates sobre el uso de la tecnología en alta mar y la responsabilidad del Estado en la gestión de los recursos.
La comunicación como puente: celulares en el mar
Un fenómeno inédito empezaba a cambiar la vida de los pescadores: la posibilidad de comunicarse con sus familias desde alta mar gracias a la tecnología celular.
- Antes, los tripulantes podían pasar semanas sin contacto directo con sus hogares.
- Ahora, la tecnología permitía llamadas y mensajes en tiempo real, disminuyendo la sensación de aislamiento.
- La modernización en comunicaciones se presentaba como un alivio psicológico y emocional en un contexto de gran incertidumbre laboral.
Sin embargo, esta mejora en la vida a bordo contrastaba con la dureza de la situación económica que enfrentaban las familias.
Conflicto social: protestas y solidaridad
La crisis pesquera se expresaba en las calles:
- Movilizaciones y cortes de ruta mostraban el descontento de obreros, sindicatos y familias enteras.
- El reclamo central: preservar los puestos de trabajo y garantizar ingresos dignos.
- Sectores de la comunidad marplatense se sumaban en solidaridad, reconociendo que la problemática pesquera tenía un impacto directo en el tejido social y económico de la ciudad.
En medio de la protesta, la consigna era clara: «No bajaremos la guardia, seguimos firmes hasta que se nos escuche».
Aprile: un problema que abarca todo el litoral
El diputado y dirigente portuario Pedro Aprile advertía que la crisis no se limitaba a Mar del Plata, sino que afectaba a todo el litoral marítimo argentino.
Sus puntos clave:
- Falta de políticas integrales para el manejo de la pesca.
- Necesidad de coordinación entre Nación, provincias y sector privado.
- Riesgo de colapso social en ciudades portuarias si no se encontraba una solución rápida.
Acusaciones políticas: Meijide vs. gobierno de Menem
La secretaria de Acción Social, Graciela Fernández Meijide, responsabilizó directamente al gobierno de Carlos Menem por la crisis, denunciando:
- Ausencia de medidas para proteger el empleo.
- Descontrol en la explotación pesquera.
- Falta de previsión frente al impacto social de la caída de la producción.
En contrapartida, representantes del oficialismo defendían la gestión, alegando que la apertura económica y la modernización eran necesarias para la competitividad a largo plazo.
Temor por el puerto mercante
Paralelamente, surgía el temor de que el puerto mercante de Mar del Plata se viera afectado por la misma inestabilidad que golpeaba a la pesca:
- Reducción de operaciones de carga.
- Pérdida de contratos internacionales.
- Posible desplazamiento de rutas marítimas hacia otros puertos más estables.
📌 Síntesis del momento histórico (1999)
La edición refleja un triple escenario:
- Avance tecnológico que mejora la vida de los trabajadores en alta mar (telefonía celular).
- Crisis estructural de la pesca, con impacto directo en el empleo y la economía local.
- Clima político polarizado, donde las culpas se reparten entre gobierno nacional y opositores, sin una solución inmediata a la vista.
✍️ Roberto Gomes (ex jefe de redacción diario El Atlántico MDQ)
Arquitecto, periodista, ambientalista, activador de conciencia urbana.
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